
Los nombres de los detenidos y los cargos que se les imputan no han sido desvelados, pero según fuentes oficiales, los sospechosos planeaban explotar un coche a las afueras de un templo en el barrio de Riverdale, en el Bronx neoyorquino. Además, según fuentes recogidas por la cadena CNN, tenían previsto atacar un centro comunitario judío y derribar aviones militares con misiles Stinger.
"Ha sido una investigación larga y totalmente planificada, y muestra que la amenaza de terroristas entrenados en nuestro país es real", ha asegurado Peter King, republicano del Comité de Seguridad Interior.
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